La atleta australiana Jessica Fox sufrió el martes un contratiempo con su kayak durante la final del canotaje eslalon K-1 femenino en la Olimpiada de Tokio 2020 y recurrió a un ingenioso truco para repararlo.
El problema se presentó antes de la competencia, cuando el morro de su kayak resultó dañado, poniendo en peligro su participación en el evento.
Tras varios intentos infructuosos por repararlo y cuando ya nada parecía tener remedio, los miembros de su equipo colocaron una mezcla de carbono en el lugar de la avería y la fijaron con un preservativo. De esos mismos 160.000 que los organizadores del certamen repartieron a los deportistas, aconsejándoles, sin embargo, no utilizarlos.
«Apuesto a que jamás supieron que los condones pueden ser usados en reparaciones de kayak», escribió en su cuenta de TikTok Fox, quien finalmente pudo competir y finalizó en tercer lugar, haciéndose con la medalla de bronce. Y bromeó con que el látex elástico del preservativo «le da al carbono un acabado suave».
Al día siguiente, Fox se consagró campeona olímpica en eslalon C-1, aunque ya a bordo de otro kayak.
La grabación publicada por la piragüista ya ha recibido más de 82.000 ‘me gusta’.
Fuente: El Siglo